Es una figura de resina sobre una peana plateada para sujetarla sobre la tarta. La novia lleva un exclusivo, pero sencillo, traje blanco de tirantes. Está adornado, de forma discreta, con un cinturón de flores. El traje es corto por la parte delante, permitiendo mostrar los elegantes zapatos de tacón. El novio lleva un traje de chaqueta azul, camisa blanca y pajarita plateada. Ambos portan en sus manos un cuadro, a modo de photocall, decorado con hojas y flores. De una forma divertida, la novia cubre sus ojos con un antifaz y el novio lleva gafas y sombrero.
Esta figura está muy de moda, ya que representa a los novios mientras se hacen fotos divertidas durante la celebración como recuerdo de este gran día.
Medidas: 18 cm aprox.